Innovar no es necesariamente inventar. Innovar en educación nos permite mirar este campo con nuevos ojos, rescatando lo que ha funcionado tradicionalmente y permitiéndonos experimentar con nuevos métodos, ideas o recursos. Donde hay un “para qué”, un SENTIDO… ¿por qué no probar? ¿por qué no darle una estructura?
Sandra Gómez Marrupe